A las 21:33 hrs. El telón negro que protege el escenario cae raudo, se prenden llamaradas de fuego y el circo ha comenzado: Kiss aparece ante 18 mil personas en el estadio Bicentenario de La Florida, lugar que anoche debutó en los megaeventos y superó la prueba sin grandes sobresaltos. Durante poco más de dos horas, el grupo fue secundado por cuatro pantallas y desplegó una pirotecnia de fuegos artificiales, papel picado y el vuelo de Genne Simmons colgado de un cable. Los vecinos del lugar salieron a mirar el espectáculo como si se tratara del año nuevo en el mar.
Para que no quedaran dudas de que se trataba de Kiss, parte del público -que tuvo a muchos niños- llegó pintado y se instalaron puestos callejeros para maquillar a la usanza de los músicos. Además, el show de Kiss fue la jornada de cierre del Pepsi Fest, cita que convirtió a Santiago en un epicentro rockero durante algunos días y que juntó a otros once artistas en Movistar Arena.
Según el director internacional de la franquicia PepsiCo, Iván Barrantes, se cumplió la meta de traer a artistas de calibre y se reunió a cerca de 70 mil personas. Barrantes adelanta: "Definitivamente vendrá una segunda versión. Cuando algo es exitoso, es contradictorio no repetirlo. Estamos pensando en un segundo Fest, pero cuándo y quiénes estarán es algo que aún requiere análisis".
Ya hay un cronograma preliminar que incluye cinco jornadas y a nombres como Foo Fighters y Pearl Jam en un sólo día, Pixies y Andrés Calamaro. También se tiene en la mira a Neil Diamond y Britney Spears, aunque ésta última podría venir en solitario en julio u octubre.
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